Un día como hoy, 5 de junio de 1904, un domingo con todos los atributos del invierno, un grupo de 33 industriales metalúrgicos, propietarios de talleres mecánicos, fundiciones, herrería de obras, talleres navales y de construcciones, fabricantes de cocinas y balanzas, rubricaron el acta fundacional de la Liga de Industriales Metalúrgicos, aprobaron sus estatutos y eligieron democráticamente a los integrantes de su primer comisión directiva.

Por ese entonces los conflictos laborales se registraban con mayor frecuencia, las huelgas generaban un proceso altamente perjudicial para las partes. A fin de dar respuesta a esta realidad, inspirados en ideas de equidad y justicia para dirimir cuestiones del capital y el trabajo, la Liga fija entre sus objetivos: Fomentar el espíritu de asociación entre sus integrantes; Adoptar medidas generales tendientes a asegurar el orden interno en sus fábricas y talleres; Promover el perfeccionamiento de los conocimientos industriales de los obreros y operarios; Propender al mejoramiento de la situación de los obreros metalúrgicos y armonizar los intereses de obreros y patrones dentro de los derechos respectivos de  unos y otros.

Estas primeras acciones que fueron el gen de la Liga, permanece aun hoy en el espíritu de nuestra Asociación. El trabajo mancomunado para mejorar las condiciones para una industria metalúrgica fuerte y sustentable generadora de trabajo calificado que contribuya a lograr una sociedad más justa y equitativa en Argentina.

La trayectoria y la importancia del sector para la economía nacional, mereció el reconocimiento del H. Congreso Nacional que instituyó el 5 de junio como el Día de la Industria Metalúrgica, coincidiendo con la fecha de la Fundación de ADIMRA.

A efectos de dejar un legado para las futuras generaciones de industriales y dirigentes, y reflexionar acerca de la importancia de la industria metalúrgica para la economía y la sociedad argentina, ADIMRA realizó un documental publicado en nuestra web, que muestra los inicios de nuestra industria hasta la actualidad, recorriendo en imágenes, palabras y hechos históricos las diferentes etapas que debió atravesar el sector hasta la actualidad. También con el mismo objetivo, se realizaron más de 300 historias de vida a industriales metalúrgicos de todo el país, que fueron publicadas en 7 libros y subidas a la web la entidad.

ADIMRA cuenta hoy con 40 cámaras sectoriales y 23 regionales lo que muestra el crecimiento institucional en los sectores cada vez más especializados y en los lugares donde la industria metalúrgica tiene presencia y desarrollo, afianzando un esquema federal como pilar de crecimiento armónico en todo el país.

En el ejercicio de esta tarea, la entidad continúa involucrada con el futuro industrial de la Argentina y el bienestar de su sociedad. Los metalúrgicos estamos convencidos que debemos defender un proyecto de país con base industrial para el desarrollo, orientado en la producción con valor agregado y tecnología; con empleo calificado que nos permita exportar bienes con alto contenido tecnológico.

Son muchos los ejemplos que certifican la fortaleza tecnológica del sector metalúrgico, solo y a modo de ejemplo por su actualidad y relevancia, podemos mencionar “VACA MUERTA” ya que constituye un gran potencial para nuestra actividad y requiere de un alto nivel tecnológico  a los proveedores argentinos. Otros sectores como el minero, petróleo y gas, maquinaria agrícola, GNC, entre otros, también son signos de la fortaleza del sector en tecnología y competitividad internacional.

En este convencimiento es que debemos defender lo logrado, superar los problemas que plantea la coyuntura, pero evitar que un modelo basado solo en la exportación de materias primas y la especulación financiera, esté por encima de un modelo productivo único capaz de generar trabajo y desarrollo para el bienestar e inclusión social de toda la población.

La seriedad y solvencia que ha caracterizado al trabajo de ADIMRA a lo largo de los años constituye su real fortaleza. La permanente adaptación a los cambios dinámicos que fueron imponiendo los tiempos, es lo que nos ha permitido transitar estos 115 años de vida institucional, dando respuesta a las necesidades que requiere un mundo globalizado y cambiante, asumiendo un rol estratégico para promover el desarrollo y la innovación tecnológica, particularmente de las PYMES, con una posición proactiva y un estrecho acercamiento para detectar las necesidades de nuestras industrias.

En esta línea de acción la entidad ha venido trabajando intensamente en los últimos años, contando hoy con una Red de Centros Tecnológicos, destinada a acompañar con recursos y nivel profesional la modernización de las empresas del sector en un firme acercamiento con las instituciones y organismos vinculados a la tecnología y a la innovación, tanto locales como del exterior. Fue así que el 3 de abril pasado, se inauguró el CETEM – Centro Tecnológico Metalúrgico, que funciona en el Parque Industrial PITEC de Florencio Varela, y está destinado a acercar soluciones y servicios tecnológicos para la realización de Ensayos de Compatibilidad Electromagnética, Asistencia en desarrollo de sistemas basados en Seguridad Intrínseca y Funcional y Simulación Computacional en Procesos de Conformado, contando para ello con equipamiento de primer nivel.

Estamos comprometidos a seguir defendiendo la sustentabilidad de los metalúrgicos: Formación, desarrollo tecnológico, inclusión de las pymes a la denominada industria 4.0 son tareas que continuamos desarrollando.

Sin embargo no podemos desconocer que los metalúrgicos nos encontramos en una situación compleja como consecuencia de una dinámica de los acontecimientos que resulta poco propicia para el desarrollo de la industria: lamentablemente los errores del pasado no permitieron afianzar un proceso de industrialización como Política de Estado.

Los altos costos de los insumos, sumado a las altas tasas de interés configuran, entre otras razones, una situación delicada de competitividad. Las PYMES metalúrgicas están haciendo un gran esfuerzo para mantener sus recursos humanos por considerarlo  un importante activo de la empresa  por su alto nivel de capacitación y formación promedio. Para ello ADIMRA ha contribuido desde su instituto IAEA, capacitando a más de 22.000 trabajadores y futuros trabajadores en las categorías de oficios y mandos medios.

Para llegar a este presente, muchos han colaborado, por ello va  un especial agradecimiento a todos los ex presidentes de la entidad, a los dirigentes de las Cámaras, Consejo Directivo y Comité de Presidencia que ceden su valioso tiempo en favor de los objetivos comunes. También un agradecimiento especial a las industrias metalúrgicas que son el verdadero pilar y objetivo de  las acciones institucionales de ADIMRA.

Descargar documental elaborado por ADIMRA aquí

Fuente: ADIMRA