20 Nov 2018

Comercio exterior rafaelino: ¿Qué podemos esperar para el 2019?

El 2019 espera a los rafaelinos con el desafío de diversificar la matriz de exportación, incluyendo productos como servicios de software, desarrollo de nueva tecnología aplicada al agro o productos resultantes de la economía del reciclaje.

Por Augusto Rolando (*)

Las exportaciones de Rafaela (Santa Fe, Argentina) se concentran en dos grandes rubros, la industria de los alimentos y la industria metalmecánica. El primer rubro incluye productos derivados de la leche, granos y carnes. El segundo corresponde a la industria de autopartes, donde tienen un gran peso las empresas de válvulas.
Las ventas al exterior de la industria local vienen de dos periodos de caída y un repunte en 2017. El 2018 parece continuar con la tendencia alcista del año pasado, reforzada por la suba del tipo de cambio, lo que incentivó a las empresas a exportar y mejorar los niveles de ventas anteriores. Aunque los pronósticos para 2019 son buenos, hay algunas variables internacionales a las que tenemos que estar atentos.
Dos socios, dos desafíos
Según la Cámara de Comercio Exterior de Rafaela, Brasil es nuestro principal comprador, superando ampliamente a Alemania y Estados Unidos, que están en segundo y tercer lugar, respectivamente. El nuevo gobierno brasileño prometió apertura económica, reducir su déficit fiscal y mantener una buena relación con su país vecino, Argentina. Además, el Fondo Monetario Internacional estima que el Brasil de Jair Bolsonaro crecerá un 2,4 % en 2019, lo que indica buenos signos para el comercio exterior rafaelino.
Sin embargo, el hecho de que el ultraderechista no parece estar de acuerdo con el Mercosur, sumado a que mostró interés en firmar acuerdos bilaterales con otros países, genera un manto de preocupación sobre la industria argentina y rafaelina, ya que puede afectar la relación exclusiva que nos brinda el acuerdo comercial. Cabe recordar que Brasil es el principal comprador de productos automotrices nacionales y en el marco del Mercosur lo hace a arancel 0.
Por otra parte, Estados Unidos, otro de los socios importantes para la ciudad de Rafaela, atraviesa una guerra comercial con China que parece no tener fin. Todo comenzó cuando el presidente de Estados Unidos decidió repatriar sus industrias y disminuir el déficit comercial con China para “hacer a Estados Unidos grande de nuevo”. Expertos mencionan que China es quien más tiene para perder en esta escalada arancelaria en su camino a convertirse en potencia económica global.
China no es un socio comercial de gran talla para la industria rafaelina, aunque sí lo es para el país. De todos modos, el enfrentamiento puede tener repercusiones en casi todos los países y ciudades, ya que eleva el precio internacional de productos e insumos. El resto del mundo observa y especula con que los desajustes arancelarios y comerciales generados por este enfrentamiento no repercutirán en sus intereses.
El 2019 espera a los rafaelinos con el desafío de diversificar la matriz de exportación, incluyendo productos como servicios de software, desarrollo de nueva tecnología aplicada al agro o productos resultantes de la economía del reciclaje. Se torna fundamental para la ciudad capacitar a pymes y emprendedores en cultura exportadora, es decir, innovar y desarrollar productos o servicios capaces de satisfacer necesidades que trascienden fronteras. Por otra parte, siempre es recomendable buscar nuevos destinos de exportación y así reducir vulnerabilidades.
En conclusión, la industria rafaelina estará sujeta al crecimiento de Brasil y a medidas que no sean hostiles al intercambio comercial bilateral. En lo que respecta a China y EE. UU. es dificultoso establecer cómo puede repercutir la guerra comercial en la industria. Por un lado, puede generar oportunidades a la industria del agro, ya que importadores chinos buscarán mejores precios en otros países productores; por otro lado, sabemos que estos enfrentamientos pueden aumentar los precios internacionales y desacelerar el comercio con sus socios más directos.

*El autor es licenciado en Relaciones Internacionales y Coordinador del área de Relaciones Institucionales de Córdoba Global – Centro de Estudios Internacionales.

Fuente: La Opinion