Santa Fe: sugieren ampliar la oferta exportable y el destino de sus ventas
Así lo sostiene un informe sobre las exportaciones con origen en la provincia de Santa Fe durante el período 2013-2018.
El Centro de Estudios y Servicios (CES) de la Bolsa de Comercio de Santa Fe, elaboró un informe que analiza las exportaciones con origen en la provincia de Santa Fe, en el período comprendido entre 2013 y 2018, poniendo el acento en el destino; la composición de las ventas al exterior, el volumen monetario y las cantidades exportadas.
En 2018 la provincia de Santa Fe exportó USD 13.564 millones, un total muy similar al obtenido en 2015, 2016 y 2017. En este sentido, en el período 2013-2018, los mayores volúmenes monetarios se lograron en 2013 y 2014, con ventas al resto del mundo por valores superiores a los USD 16.000 millones.
Por su parte, si se consideran las cantidades exportadas, se visualiza un crecimiento sostenido hasta 2017 y una disminución del 12,6% en el último año analizado. Es decir que, teniendo en cuenta únicamente la información en bruto, podría suponerse que las caídas en los montos exportados se deben bien a bajas en los precios internacionales o a un cambio de estructura en la composición de las ventas.
Asimismo, el informe divide las exportaciones en tres rubros: Productos Primarios (PP), Manufacturas de Origen Agropecuario (MOA), Manufacturas de Origen Industrial (MOI) y Combustibles y Energía (CyE).
Durante el período estudiado no se observan cambios significativos en la composición de las exportaciones, por lo cual la baja en las cifras obtenidas en dólares, se corresponde fundamentalmente, con la prolongada caída de los precios de los commodities vinculados con el agro producida desde el año 2012.
MIRANDO EL FUTURO
A raíz del análisis efectuado en relación con las exportaciones santafesinas entre 2013 y 2018 queda en evidencia la importancia que asume la profundización de vínculos con algunos países y regiones. No se observan cambios estructurales en las variables evaluadas a pesar de la apertura económica que inició Argentina en los últimos años; pero el resultado central del reporte señala que, lamentablemente, el flujo global de las ventas locales al resto del mundo se encuentra altamente concentrado tanto en término de destinos como en relación a los productos transados.
Los desafíos que plantea esta situación -continúa- van en línea con una mayor diversificación de la oferta y con una atomización paulatina de los socios comerciales, instancias que deben plantearse con estrategias de largo plazo y en sintonía con las políticas nacionales.
Actualmente, Brasil se erige como uno de los espacios de mayor importancia en la estructura comercial santafesina. Ante una recuperación del país vecino, es un momento crucial para afianzar las relaciones comerciales en el marco de un nuevo gobierno que propone introducir cambios de fondo en la dinámica económica.
Por otra parte, países como Estados Unidos, Polonia, Países Bajos o España han tomado relevancia como importadores de manufacturas de origen industrial, rubro con mayor poder de agregación de valor e impacto en la generación de puestos de trabajo. El desafío en este caso, es lograr mayor estabilidad y previsibilidad. Los años analizados presentan constantes oscilaciones en los niveles y cantidades exportadas.
En cuanto al continente asiático, principal destino de los productos primarios y manufacturas de origen agropecuario, la creciente exportación de carnes a China es un elemento alentador. Considerando el tamaño de la economía del gigante asiático, la profundización de los vínculos comerciales puede ser un factor que apuntale al sector ganadero santafesino.
Por otra parte, las mayores exportaciones a lo largo del período a países como la India y Vietnam son aspectos relevantes, sobre todo teniendo en cuenta que ambas naciones lideran actualmente los primeros puestos del índice de crecimiento económico a nivel mundial, por lo que son grandes mercados en crecimiento. En este sentido, poder introducir bienes con mayor valor agregado debe ser un elemento clave en las alianzas comerciales que se efectúen.
El informe remarcó que a finales del año 2018, el gobierno nacional tomó la decisión de eliminar el escalonamiento arancelario en el complejo sojero. Dicha medida, naturalmente, genera un desincentivo al agregado de valor en esta industria. Asimismo, las diversas manufacturas de origen agropecuario basadas en el agregado de valor a esta oleaginosa resultan algunos de los principales productos de exportación con origen en la provincia.
Por último, advierte que el conflicto entre los Estados Unidos y China agrega un aspecto extra a dicho escenario, ya que puede haber mayor demanda a la compra del poroto de soja por parte del país asiático, lo que podría generar aún menos incentivos para la incorporación de valor agregado. Por ende, la industria de la molienda de soja se encuentra en un contexto desfavorable para incrementar su producción y exportaciones, concluye el informe del CES.
Fuente: La Opinion