Se garantiza la continuidad de las relaciones comerciales
BUENOS AIRES, 28 (NA). – Tras las críticas en campaña de Javier Milei al presidente brasileño, Luiz Inácio «Lula» Da Silva, la designada canciller, Diana Mondino, dio señales que llevaron calma a la Unión Industrial Argentina (UIA), tras afirmar que seguirán «fortaleciendo» las relaciones entre la Argentina y ese país.
Mondino realizó un viaje relámpago al Gigante Sudamericano y le entregó a su par brasileño, Mauro Vieira, una carta personal del libertario en la que cursaba una invitación formal para que «Lula» asista a su ceremonia de asunción.
Brasil es el principal socio comercial de Argentina con un flujo transaccionado en lo que va del 2023 de más de 25.349 millones de dólares, lo que representa el 17,6 por ciento de las exportaciones y el 24 por ciento de las importaciones argentinas, según el Instituto Comercial Argentino (ICA) que publica el Indec a octubre de 2023.
Durante el transcurso de los primeros diez meses del año Argentina exportó US$ 9.967 millones e importó US$ 15.382 millones por lo que registra un déficit comercial de US$ 5.415 millones.
En este ámbito, una comitiva con autoridades de la Unión Industrial Argentina, encabezadas por el presidente de la entidad, Daniel Funes de Rioja, participaron del XI Foro Empresarial del Mercosur, que se llevó a cabo en Brasilia.
El encuentro contó con la participación de la UIA, la Unión Industrial Paraguaya y la Cámara de Industrias del Uruguay, teniendo la finalidad de avanzar en el fortalecimiento del Mercosur.
En este marco, Funes de Rioja destacó la potencia que tiene la región en el contexto global actual e hizo hincapié en «la necesidad que se tiene como bloque de dar un paso en la integración hacia un Mercosur moderno y dinámico, capaz de proveer al mundo lo que hoy demanda: energías de transición y renovables, alimentos, productos de minería, economías basadas en el conocimiento y muchas más cadenas con potenciales capacidades para competir».
El titular de la UIA resaltó que «hay que seguir trabajando para integrar las cadenas de valor, como así también abordar las agendas de infraestructura, conectividad, industria 4.0 y sustentabilidad, todas ellas fundamentales para la industria del futuro».
La comitiva industrial fue recibida por el embajador de la Argentina en ese país, Daniel Scioli, quien se presume seguirá al frente de esa sede diplomática.
Scioli se reunió con la delegación argentina que estuvo integrada, además de Funes de Rioja, por los vicepresidentes Miguel Ángel Rodríguez, David Uriburu, Adrián Kaufmann Brea, Luis Tendlarz y Paula Bibini.
Durante el XI Foro Empresarial del bloque regional, los presidentes de la Unión Industrial Argentina, la Confederación Nacional de Industria, la Unión Industrial del Paraguay y la Cámara de Industrias del Uruguay, se dirigieron a los gobiernos de los países miembros del MERCOSUR para señalar sus prioridades en la agenda del bloque.
El Consejo Industrial del Mercosur reafirmó su apoyo y reconoció el papel positivo de la integración regional en el desarrollo económico y social.
«La promoción del comercio y la inversión dentro del bloque tiene un gran potencial para ampliar la capacidad productiva, generar empleos de calidad e impulsar el crecimiento económico», sostuvieron.
«Fortalecer rápidamente el MERCOSUR frente a las nuevas realidades de la economía global, que han transformado los modelos productivos y las relaciones comerciales, es crucial para nuestra asociación estratégica. La adopción de políticas que fomenten la innovación, la digitalización, el desarrollo sostenible y la integración productiva es fundamental para dinamizar nuestros flujos comerciales y promover la inserción internacional competitiva», agregó el comunicado.
En este contexto, las entidades de la industria acordaron cinco prioridades para dar respuesta a los desafíos y oportunidades de la coyuntura internacional: implementar el Acuerdo sobre Facilitación del Comercio del Mercosur, concluir el Acuerdo de Asociación Mercosur-Unión Europea, impulsar la agenda comercial y de sostenibilidad del bloque regional, avanzar en materia de convergencia regulatoria e institucionalizar un mecanismo de diálogo formal con el sector productivo.
Fuente: LA OPINIÓN