Unidos y Pullaro ratificaron su hegemonía en la Provincia
Por Darío H. Schueri
Desde Santa Fe. – El escrutinio definitivo confirmó el triunfo de Unidos para Cambiar Santa Fe en las tres categorías provinciales en juego el pasado domingo 10. Maximiliano Pullaro ganó en los 19 departamentos a gobernador, Clara García hizo lo propio en la categoría diputados en 13, la misma cantidad de senadores que en total logró el Frente. El peronismo, además de la gobernación y seis departamentos, perdió casi todas las ciudades importantes (solo le quedaron Reconquista y Villa Constitución) configurando una debacle histórica que seguramente golpeará fuerte en la inmediata elección nacional.
Maximiliano Pullaro se transformó en el dirigente político nacional por excelencia con su rutilante triunfo. Patricia Bullrich lo exhibió al lado en la “selección de los nuevos líderes” de Juntos por el Cambio; viajó al Chaco a apoyar al candidato de Juntos por el Cambio, y está bajo la lupa del círculo áulico de la política. El joven radical (48 años) le devuelve al Partido el Sillón del Brigadier después de 60 años, sucediendo en la historia radical a Aldo Tessio.
Hijo de las tradiciones políticas (la “vieja política” ó “casta” como se intenta degradarla), el flamante gobernador, al decir del periodista y escritor Rogelio Alaniz “su identidad radical la forjó desde su primera juventud. Pertenece por filiación histórica a la generación de radicales que ingresan a la vida pública en este siglo identificados con la tradición del partido, pero muy en particular con el ejemplo y las convicciones cívicas de Raúl Alfonsín”, y – agregamos nosotros – obtuvo el apoteósico triunfo a fuerza de militar pueblo por pueblo y, citando una vez más al distinguido colega Alaniz “confirma contra la abusiva letanía acerca del agotamiento de los viejos partidos, la vitalidad del tronco de un árbol que sigue dando ramas fuertes y hojas verdes, tal vez porque sus raíces vitales están bien hundidas en la tierra”.
El triunfo de Maximiliano Pullaro fue el resultado de la abnegación de radicales, socialistas y “proístas” junto a otras tantas voluntades que, como señaláramos en nuestra columna anterior, entendieron que, sin dejar las convicciones políticas de lado, se podía recuperar el gobierno provincial uniéndose ante un peronismo que, aunque quisieron mostrar unidad después de las PASO, hoy los reproches no reflejan que haya ocurrido, más bien todo lo contrario, sumado a la mala fama del gobierno nacional que terminó de escorar el barco peronista santafesino hasta hundirlo, pese los denodados esfuerzos hasta inclusive después del último momento del gobernador Omar Perotti.
Senadores de la talla de Lisandro Enrico, Felipe Michlig, Hugo Rasetto, Rodrigo Borla, “Chacho” Marcón, Germán Giacomino, entre otros, revalidaron sus bancas holgadamente y ayudaron a vigorizar el triunfo de Unidos, junto a alfiles como el diputado radical Fabián Bastía que además de armar pueblos y ciudades del Norte, convenció de participar a los ahora flamantes senadores por San Javier y Garay; también el barlettismo y el PRO en esta capital, que colaboraron para batir otro récord a intendente junto al médico Juan Pablo Poletti, ó el corralismo con la colega periodista Silvina Cian, que incursionando en política como candidata a concejal también rompió el récord histórico de votos.
AHORA EL ARMADO DE UN
GABINETE QUE ESTÉ A LA ALTURA
Superados los festejos, ahora el gobernador electo con 1.031.964 votos (55.71%) según el escrutinio definitivo, se abocará en primer lugar a diagramar la nueva estructura ministerial que, conforme a sus declaraciones estará orientado a modificar la actual Ley Orgánica de Ministerios para cambiar la actual estructura gubernamental de 13 ministerios. «La intención es fusionar algunas áreas y reducir la cantidad de ministerios, pero todo tiene que ser consensuado en el marco de lo que es el frente Unidos» declaró Pullaro, para lo cual este martes se llevaría a cabo la primera reunión “de transición”.
Según se pudo saber, el área de justicia que hoy está bajo la órbita del Ministerio de Gobierno sería trasladada al Ministerio de Seguridad, cuyo titular tendrá el homérico desafío de lidiar contra el cáncer del narcotráfico, básicamente en Rosario donde sicarios de la mafia de la droga ya le dejaron el primer mensaje post triunfo a Pullaro, fusilando a plena luz del día a un oficial de la AIC frente a su repartición.
Se volvería al histórico Ministerio de Obras Públicas, Producción adquiriría un nuevo perfil, se fortalecerá el Fondo de Inversión y Desarrollo creado por ley durante el FPCYS con recursos públicos, privados y de cooperación internacional, como palanca para el desarrollo productivo. En este sentido el Dr. Miguel Ángel Peralta, uno de los referentes más importantes de la Economía del Conocimiento en nuestra ciudad aseveró que, como consecuencia del aislamiento que ha caracterizado la gestión del gobernador Perotti, no se generaron las políticas de estado imprescindibles para el pleno desarrollo de esa fundamental área de la economía provincial.
En principio dos legisladores provinciales reelectos serían convocados para formar parte del gabinete (uno de ellos ya habría dado el sí), aunque no se descarta que otros podrían abandonar sus reelectas bancas para mudarse al Poder Ejecutivo.
De ahora en más el objetivo es conseguir que ese millón de votos de Unidos se muden a la candidata de Juntos por el Cambio Patricia Bullrich, para consolidar un trabajo mancomunado con Nación a partir del 10 de diciembre; aunque Pullaro ya le avisó a Javier Milei que sus políticas de “motosierra” para con Estados provinciales supuestamente prebendarios, no podría aplicarlas con Santa Fe, una de las Provincias que más aporta al estado nacional y menos recibe a cambio.
Fuente: LA OPINIÓN