Vicentín: en proceso de reestructuración, afirma compromiso de pago a acreedores
Posterior a comenzar a incumplir los pagos programados hacia su red comercial, la compañía emitió un comunicado afirmando que la actual es una «coyuntura financiera», y busca encontrar alternativas de pago en los plazos más cortos posibles.
Días atrás, a través de un comunicado Vicentín explicó a sus acreedores que en el marco del proceso de reestructuración iniciado el pasado 4 de diciembre con la cesación de pagos, buscarán, con el apoyo de todas las partes, retomar la normalidad de sus operaciones.
Explícitamente, reiteraron un pedido de disculpas por los inconvenientes ocasionados con la medida y la gravedad de las implicancias que esto ha generado.
LO QUE SE DIJO
«Entendemos que el tiempo es un factor determinante para todos los actores involucrados. En ese sentido estamos abocados a encontrar una alternativa en el plazo más corto posible, que cuente con el apoyo de todas las partes y que nos permita retomar la normalidad de la operación. De parte del directorio y accionistas de Vicentín hay una actitud franca y decidida para superar esta situación, generando los menores efectos perjudiciales posibles a nuestra red comercial. Hemos sido muy prudentes y queremos seguirlo siendo para no responder sobre ningún tipo de especulación o hipótesis hasta contar con un plan adecuado para sortear esta coyuntura financiera», comunicaron desde la firma de acuerdo a un informe de TodoAgro.
Y remarcaron que esta reestructuración, que comenzaron a realizar apoyados de un equipo profesional calificado, busca diagramar «un plan de negocios y de reestructuración serio, viable y posible que requerirá de la mayor flexibilidad y predisposición de todas las partes», con la intención de no privilegiar a ningún acreedor en perjuicio de otros durante el proceso.
PEDIDO DE LA BCR
En un comunicado emitido desde la Bolsa de Comercio de Rosario hacia sus asociados y operadores, habiendo transcurrido antes del 12 de diciembre una semana desde el momento en que la compañía informó el inicio de su reestructuración de pagos y sin conocer al día de la fecha una propuesta concreta y firme para sus acreedores, la institución resolvió enviar a Vicentín una intimación.
En la misma se apuntó que «hemos resuelto intimar al representante Vicentín S.A.I.C. ante la BCR para que -en cumplimiento de lo dispuesto en el artículo 11º inciso 6) del Estatuto y del artículo 28º del Reglamento de Operadores del Mercado Físico de Granos- en el término de 24 horas presente un informe sobre el total de las deudas vencidas al día de la fecha por contratos de compraventa de granos recibidos a precio firme o a fijar precio y los términos generales de una propuesta de regularización de la misma».
LOS INICIOS DE VICENTIN
Los inicios del grupo agroindustrial Vicentín se remontan a fines de la década del ’20, con un pequeño comercio de acopio y ramos generales en Avellaneda, localidad situada al Norte de la provincia de Santa Fe. Años más tarde, la empresa inició su actividad con la puesta en marcha de su primera planta desmotadora de algodón y fábrica de aceite, resultante de la molienda de semillas de algodón, lino y maní.
Estas innovaciones iniciales se fueron potenciando hasta alcanzar dimensión industrial relevante, cuando en 1966 se incorporó en la molienda de semillas el proceso de extracción por solventes, que condujo a que los niveles de producción se incrementaran considerablemente, y que la compañía se insertara definitivamente en el sector agroindustrial argentino.
Con el paso del tiempo, la empresa consolidó su expansión y crecimiento.
Y a fines de 1979 puso en marcha una segunda planta de molienda de soja y girasol en Ricardone, al Sur de la provincia. Al mismo tiempo iniciaron operaciones en nuevas plantas desmotadoras de algodón situadas en puntos neurálgicos de cosecha. Un hito fundamental en la trayectoria de Vicentín consistió en empezar a operar y exportar lo manufacturado de aceites, harinas y pellets desde su propia Terminal de Embarque, localizada en la ciudad de San Lorenzo a orillas del Río Paraná. En 1997, con amplia visión de futuro comienza a funcionar una tercer planta de molienda de soja en el mismo complejo portuario.
A comienzos del nuevo milenio, Vicentín a través de su sociedad controlada Algodonera Avellaneda se involucró en el rubro textil con la adquisición de una nueva planta especialmente dedicada a la hilandería y tejeduría con importantes volúmenes de producción. Años más tarde se incorporó al grupo el complejo frigorífico Friar, importante protagonista en el rubro cárnico exportador.
En sus 3 plantas industriales se procesan gran variedad de cortes vacunos y derivados destinados tanto al mercado interno como a los mercados externos más exigentes que eligen nuestra distinguida carne argentina. Friar también cuenta con una amplia red con más de 50 locales de venta al público distribuidos en 15 provincias.
Y hace un tiempo, se produjo una situación que motiva lo que se cita en el título de la nota.
El progreso y el constante crecimiento orientaron la búsqueda de otros centros generadores de materia prima. Hacia 2005 inició sus actividades Vicentín Paraguay S.A, como agente de comercialización de soja destinada a los complejos industriales en permanente expansión sumando una cuarta planta de molienda en San Lorenzo, dotada con moderna tecnología y elevando la capacidad de molienda a 21 mil toneladas diarias.
A mediados de 2007 la compañía comenzó a involucrarse en el sector de biocombustibles, siendo la primer empresa del país que exportó biodiesel, desde su planta en Avellaneda. Luego, a partir de un joint venture entre Oleaginosa Moreno Hnos., Vicentín y Molinos Río de la Plata surgió Renova, destinada a la producción a escala de biodiesel, destacándose como la planta más grande de América del Sur.
Al mismo tiempo, en el rubro algodón se produjeron inversiones de relevancia. La compañía inauguró una planta procesadora para la obtención final de algodón hidrófilo y otros productos derivados.
Con el objetivo trazado de transformar proteína vegetal en carnes, en 2007 comenzó su operación Los Corrales de Nicanor. Este sistema intensivo de engorde alberga miles de cabezas de ganado bovino destinado a faena, alimentado con balanceados elaborados en planta Avellaneda Vicentín continuó creciendo e incursionando en nuevos rubros (confección textil, agroquímicos, vinos, miel y de insumos farmacéuticos) con el claro objetivo de ser protagonista relevante en cada uno de ellos.
Fuente: La Opinion