08 Nov 2024

Crece el comercio exterior pero no siempre es negocio

En la comparación interanual subieron 9,9% en volumen, 10,8% en monto en dólares y bajaron 1,9% en litros de leche equivalentes.

En el acumulado del período enero-septiembre de 2024 aumentaron un 8,9% en volumen, subieron los ingresos en dólares un 1,8% y los litros equivalentes superaron al período enero-septiembre de 2023 en un 11,4%.

Según el informe del OCLA, “la leche con destino de exportación representaba hasta noviembre de 2023 el 20% de la producción total, y ya en enero la participación de las exportaciones estuvo entorno al 33,2% de la producción total; en febrero subió al 38,6%, en marzo comienza a caer al 29,4%, en abril 29,0%, en mayo fuertemente al 22%, y vuelve a caer en junio al 19,7%. Se recupera algo en julio (21,6%), cayendo nuevamente al 18,6% en agosto y recuperando algo en septiembre pasado”.

El resto (70/80%) de la producción se coloca en el mercado interno, pero “con un poder adquisitivo totalmente deteriorado por el proceso inflacionario, sobre todo de la clase media, principal demandante de lácteos de mayor valor agregado), hubo una disminución del consumo doméstico total del 17% para los primeros seis meses del año, respecto a igual período del año anterior”, indicó el observatorio.

“El tipo de cambio para las exportaciones, luego de la fuerte devaluación en diciembre 2023, se viene ajustando a un ritmo menor que la inflación (crawling peg del 2% mensual) -analizó el OCLA-. Esta situación hace que se perdieran todas las ventajas competitivas del tipo de cambio (devaluación, dólar especial de exportación 80/20, brecha cambiaria mayorista BCRA y Contado con Liquidación y eliminación de derechos de exportación) y se vuelva a tener el mismo tipo de cambio efectivo que sep/23. Por lo tanto, los precios internacionales actuales, competitivos por cierto, generan un poder de compra de leche al productor, inferior al precio actual de la misma”. Según el OCLA, “es muy probable que los volúmenes exportados puedan sufrir alguna baja, salvo una mejora muy significativa en los precios internacionales”.

Y finaliza: “sin lugar a dudas que la cadena debe mejorar la escala, eficiencia y productividad de su sector exportador, pero hasta que ello ocurra puede transcurrir mucho tiempo y este retraso cambiario haga que la exportación sea sólo para liquidar stocks o hacerse de recursos que no se pueden lograr en un mercado interno muy alicaído como mencionamos más arriba”.

Fuente: La Opinión